La polenta no es canalla por los pelos del SEO, pero podría ser perfectamente una receta canalla. Es un plato bien sencillo, barato y que admite todo tipo de modificaciones, es tan versátil que se puede hacer dulce. Esta receta que os traigo es básicamente para acompañar asados pero en el futuro cercano os triaré alguna receta para ponerte gocho.
La polenta es un plato tradicional italiano a base de harina de maíz cocida. La polenta de harina de maíz integral (que reconoceremos por su color amarillo) es un alimento muy completo que contiene los principales grupos de nutrientes: carbohidratos, proteínas, grasas, vitaminas, minerales esenciales y fibra. Es particularmente rica en carbohidratos complejos, cuya energía se libera lentamente y nos ayudan a sentirnos bien durante más tiempo. En ese sentido es una alternativa muy saludable a la patata o a la pasta.
Otro punto a favor es que es de muy fácil digestión, por lo que puede consumirse sin problemas por la noche y con cualquier tipo de acompañamiento salvo que la hagas frita o le pongas mazo tocino. La polenta no contiene gluten, por lo que es un alimento ideal para aquellas personas celíacas, o que tienen intolerancia al gluten de la harina de trigo.
Dificultad
Receta especial para seres unineuronales
Ingredientes
- Polenta Arpis (no me pagan por decir su marca, pero les he chuleado los textos)
- Tres veces el volumen de polenta en agua
- Sal
- Aceite de oliva y/o mantequilla
La preparación de la polenta se basa en cocer la harina de maíz con agua o algún tipo de caldo, leche o el líquido que nos convenga según la receta. Lo importante es prestar atención a las proporciones, una medida de polenta por tres medidas del líquido se considera lo ideal, aunque si la deseamos mas dura con la intención de freír o asarla, hay que poner un poco menos de líquido. La forma en que incorporamos la polenta al agua es importante, siempre hay que hacerlo cuando el agua, leche o caldo ya esté hirviendo, y debemos incorporarla en forma de lluvia y sin dejar de revolver; de otra forma se formarían grumos que arruinarían nuestra presentación. La polenta se considera cocida cuando se separa fácilmente de las paredes del recipiente. Una vez lista la puedes enriquecer con unos trozos de mantequilla, panceta frita, setas, chorizo o lo que te apetezca y tenga cierto sentido.