Los huevos pochados con espárragos, salmón ahumado y salsa benedictina.

Una receta de las de fiesta que es mucho más fácil de lo que parece los huevos pochados con espárragos, salmón ahumado y salsa benedictina será tu nueva receta favorita.

La salsa benedictina, más conocida como salsa holandesa, es un emblema de la cocina francesa, aunque su nombre sugiere conexiones con la historia estadounidense. Su invención se le atribuye a un chef francés, Marie-Antoine Carême, conocido como el «rey de los chefs y el chef de los reyes», que la introdujo en el siglo XIX.

Sin embargo, otra historia señala el Waldorf Hotel en Nueva York como su lugar de origen, donde se dice que un cliente de apellido Benedict solicitó algo nuevo y diferente para su desayuno, resultando en la creación de un plato que llevaba esta salsa como elemento distintivo. Yo os traigo una versión fácil, la original tiene más curro.

Dificultad

Para sanos gourmets.

Ingredientes:

• 4 huevos frescos.
• 1 manojo de espárragos.
• 100 g de salmón ahumado.
• 2 cucharadas de vinagre blanco.
• Sal.
• Pimienta.

Para la salsa benedictina fácil:

• • 3 yemas de huevo.
  • 1 cucharada de jugo de limón.
  • 125 g de mantequilla derretida.
  • Sal.
  • Pimienta.

Comienza por preparar los espárragos: lávalos y corta los extremos leñosos. Cocínalos al vapor o hiérvelos en agua salada hasta que estén tiernos pero aún crujientes, unos 3-4 minutos.

Para pochar los huevos, llena una cacerola con agua hasta unos 5 cm de profundidad y añade 2 cucharadas de vinagre blanco. Lleva el agua a una temperatura antes del punto de ebullición. Rompe cada huevo en un tazón pequeño y deslízalo con cuidado en el agua. Deja cocer durante 3-4 minutos. Retira los huevos con una espumadera y escúrrelos sobre papel de cocina.

Para la salsa benedictina fácil, pon las yemas de huevo y el jugo de limón en una licuadora o procesadora de alimentos. Procesa a baja velocidad y vierte lentamente la mantequilla derretida hasta que la mezcla se espese. Sazona con sal y pimienta al gusto.

Para servir, coloca los espárragos cocidos en los platos, pon encima un huevo pochado y láminas de salmón ahumado. Vierte la salsa benedictina sobre los huevos y sirve inmediatamente.

Marida con un buen cava.

• Alguna hierba fresca puede venir bien.
• Un chorrete de aceite de oliva al final queda bien.
• Para mi es plato único pero como tapa o acompañamiento también vale.

RESUMEN NUTRICIONAL:

* INFORMACIÓN FACILITADA POR FATSECRET.

MENÚ RECOMENDADO:

• Los huevos pochados con espárragos, salmón ahumado y salsa benedictina.
• Una pieza de fruta.

MIENTRAS TE LA ZAMPAS PUEDES PONER MÚSICA

La lista de Spotify: Lista para cocinar

O VER UN POCO DE ARTE

ARTE DIARIO: UNA OBRA AL DÍA EN INSTAGRAM.

#FRENALALORZA