Si, así es, el Mojito es el nuevo Gintonic. Si como yo estás buscando una bebida con la que amórrarte, atufarte y quedar como un ser humano cosmopolita, está es tu bebida. Una de ellas.
El Mojito es muy fácil de hacer, muy difícil de cagarla si se hace con unos sencillos pasos e ingredientes. No innoves, todavía no, ya podrás meterle mierdas, pero primero domina la técnica.
Estos son los ingredientes, no otros:
- 2 cucharadas de azúcar.
- 2 cucharadas de agua.
- 20 ramitas de hierbabuena.
- 1 lima, cortada en trozos pequeños.
- 60 ml de ron blanco.
- Hielo picado.
- 80 ml de agua con gas.
Hay que hacer un sirope simple, muy fácil. Calienta el agua con el azúcar a fuego lento y cuécelo hasta que el azúcar se disuelva (se tarda uno o dos minutos en disolver). Apaga el fuego y deja que enfríe. Recuerda que si quieres hacer más cantidad es siempre a partes iguales.
Mientras tanto, añade las hojas de hierbabuena y la lima en un recipiente como una jarra pequeña o en un vaso grande o un pozal, tú verás. Estrújalos juntos durante 1 minuto hasta que todo el jugo de la lima se exprima y los aceites se hayan desprendido de la menta. Sin hacer un puré, si te ves muy bruto hazlo solo con la lima y pon la hierbabuena después.
Añade a los vasos el sirope simple frío de agua al ron blanco. Llénalo con el hielo picado y vierte la mitad de la mezcla de mojito en cada vaso.
Cubre lo que resta de vaso con agua con gas y revuelve para que todo se integre correctamente. Añádele una pajita y unas hojas de menta por encima. Y ya te puedes atufar.